Aquí está mi escritorio cuando me preparaba para Halloween. Más documentos, más tarde.
Feliz Halloween a todos!
lunes, octubre 31, 2005
viernes, octubre 28, 2005
Comenzando a recordar
Jueves, 27 de octubre de 2005
Y llegó el gran día. Por la mañana estuve comprando playeros, porque no vine preparado para jugar aquí. Luego por la tarde estuve trabajando en mi ensayo hasta que llegó la hora de ir al polideportivo. Ellen me acompañó y me enseñó donde era. Luego llegó la hora de hacerse un hueco en el equipo. Ya estaban todos en el campo y pregunté a uno donde estaba el entrenado. Me indicó un hombre de chandal en la otra esquina y fui para allá. El entrenador era el típico prototipo de enetrenador de balonmano. Voces (en danés) y poca preocupación por sus jugadores en particular (no me preguntó ni como me llamaba ni nada). El primer jugador al que me acerqué fue uno que no tenía pinta de danés. Resultó ser un portugués que había empezado hace algunas semanas. Luego me puse a calentar con un danés y poco a poco creo que aprenderé algunas palabras técnicas y los nombres de los jugadores.
Algunas cosas curiosas:
Empezamos con futbol y los daneses no se dedicaban ni a pasar ni a regatear, solo patapún para arriba y fuerza bruta.
Soy el más pequeño (físicamente) con mucho. Esperemos que la técnica aprendida durante mi infancia sepa paliar este déficit.
Para terminar nadie estiraba. Se subieron a un cuarto que había y se pusieron a beber cerveza. Increíble. Deporte y cerveza nunca están reñidos en Dinamarca.
Antes de nosotros estaba el equipo femenino. Todas poderosamente fuertes, pero todas estaban increíblemente buenas. Es increíble lo de este país!
Después de hora y media estaba muerto (tengo que ponerme en forma como sea) pero feliz de haber hecho algo de deporte. Lo necesitaba de verdad. Bici para casa y llegué justo a tiempo para Seinfeld. Me encanta...
Y llegó el gran día. Por la mañana estuve comprando playeros, porque no vine preparado para jugar aquí. Luego por la tarde estuve trabajando en mi ensayo hasta que llegó la hora de ir al polideportivo. Ellen me acompañó y me enseñó donde era. Luego llegó la hora de hacerse un hueco en el equipo. Ya estaban todos en el campo y pregunté a uno donde estaba el entrenado. Me indicó un hombre de chandal en la otra esquina y fui para allá. El entrenador era el típico prototipo de enetrenador de balonmano. Voces (en danés) y poca preocupación por sus jugadores en particular (no me preguntó ni como me llamaba ni nada). El primer jugador al que me acerqué fue uno que no tenía pinta de danés. Resultó ser un portugués que había empezado hace algunas semanas. Luego me puse a calentar con un danés y poco a poco creo que aprenderé algunas palabras técnicas y los nombres de los jugadores.
Algunas cosas curiosas:
Empezamos con futbol y los daneses no se dedicaban ni a pasar ni a regatear, solo patapún para arriba y fuerza bruta.
Soy el más pequeño (físicamente) con mucho. Esperemos que la técnica aprendida durante mi infancia sepa paliar este déficit.
Para terminar nadie estiraba. Se subieron a un cuarto que había y se pusieron a beber cerveza. Increíble. Deporte y cerveza nunca están reñidos en Dinamarca.
Antes de nosotros estaba el equipo femenino. Todas poderosamente fuertes, pero todas estaban increíblemente buenas. Es increíble lo de este país!
Después de hora y media estaba muerto (tengo que ponerme en forma como sea) pero feliz de haber hecho algo de deporte. Lo necesitaba de verdad. Bici para casa y llegué justo a tiempo para Seinfeld. Me encanta...
jueves, octubre 27, 2005
Un poco de un antiguo deporte
Hoy madrugué mucho para ir hasta la ciudad y solicitar mi plaza en el colegio mayor. Me dijeron que como pronto habrá plazas libre en Enero, así que rezaré todos los días para ser afortunado, porque este colegio es muy selectivo. Luego pasé todo el día en la uni trabajando en mi nuevo ensayo sobre Internet de dos hojas que tengo que entregar la semana que viene. Puf que agobio!
Por la tarde Ellen me animó a apuntarme a probar un equipo de balonmano así que les escribí un email y me contestaron que mañana mismo puedo acercarme por allí. Han sido más de 5 años de sequía balonmanística, pero nunca es tarde y no poder jugar a tenis aquí me ha llevado a tomar esta decisión. Espero que los daneses no acaben conmigo en el primer entrenamiento!
Por la tarde Ellen me animó a apuntarme a probar un equipo de balonmano así que les escribí un email y me contestaron que mañana mismo puedo acercarme por allí. Han sido más de 5 años de sequía balonmanística, pero nunca es tarde y no poder jugar a tenis aquí me ha llevado a tomar esta decisión. Espero que los daneses no acaben conmigo en el primer entrenamiento!
lunes, octubre 24, 2005
El último día de minivacaciones
Domingo, 23 de octubre de 2005
Dormir, un poco de cocina y un poco de conversación por Internet. Luego fui con Philip a visitar a su amigo danés, que marchaba para Berlín el martes. Le estuvimos contando experiencias de la capital. Para volver a casa atravesamos un bosque completamente oscuro. Yo sin lentillas, solo veía la luz roja de la bici de Philip y así, lentos pero seguros llegamos a casa. Empieza a estar un poco frío por aquí cuando anochece…
Dormir, un poco de cocina y un poco de conversación por Internet. Luego fui con Philip a visitar a su amigo danés, que marchaba para Berlín el martes. Le estuvimos contando experiencias de la capital. Para volver a casa atravesamos un bosque completamente oscuro. Yo sin lentillas, solo veía la luz roja de la bici de Philip y así, lentos pero seguros llegamos a casa. Empieza a estar un poco frío por aquí cuando anochece…
Un Sábado tranquilo
Sábado, 22 de octubre de 2005
Así a lo tonto eran casi las 7 cuando me dormí, así que no me levanté antes de la 1. Me llegó un mensaje que Philip se iba de compras, así que corrí hasta la estación y estuvimos paseando por la ciudad mientras nos contábamos como había sido nuestra semana de vacaciones. Después de algunas compras tomamos el lunch en las escaleras del museo nacional con un día muy típico de otoño. Luego volvimos a casa para descansar un poco.
Así a lo tonto eran casi las 7 cuando me dormí, así que no me levanté antes de la 1. Me llegó un mensaje que Philip se iba de compras, así que corrí hasta la estación y estuvimos paseando por la ciudad mientras nos contábamos como había sido nuestra semana de vacaciones. Después de algunas compras tomamos el lunch en las escaleras del museo nacional con un día muy típico de otoño. Luego volvimos a casa para descansar un poco.
El museo
El baño más lujoso del mundo
Oasis!
Viernes, 21 de octubre de 2005
Dormí unas cuantas horas para prepararme para EL EVENTO. Fui para allí hacia las 4 (empezaba a las 8). Después de un poco más de una hora en bici, llegué al famoso Valby Hallen. Había algunos haciendo cola, pero nada espectacular. Los daneses se preocupan más por beber cerveza que por estar en primera fila. Después de aparcar la bici me encontré con un sevillano que había venido desde Lund (Suecia) sin entrada para verles. La aventura le costó 1300 coronas… Pero supongo que le mereció la pena. Lo injusto de todo esto fue que el concierto había sido cancelado previamente, así que los propietarios de una entrada antigua tuvieron reservada la zona más cercana a la banda. No fue justo. Yo que había llegado pronto y me había hecho un nuevo amigo, tuve que irme a esperar a otra cola. Allí conocí a unos cuantos daneses muy simpáticos que me ofrecieron cerveza y me contaron sus vidas. Uno era marino y había estado por España, pero sólo por el sur así que no conocía Gijón, el otro era más curioso: trabajaba en la guardia real. Sí, esos que están en la plaza con el traje pintoresco y no se pueden mover. Me dijo que era un trabajo muy aburrido y que eran 24 horas seguidas. Espero que con descansos… Luego, cuando estábamos dentro les perdí de vista con tanta gente saltando. Aún así disfrute de mi ídolos como era de esperar, aunque me esperaba algo quizás un poco más grandioso. Se ve que a Oasis le importa tanto España como Dinamarca.
Después del concierto traté de encontrar a mis nuevos amigos, pero no hubo manera. Quedé con Paolo y me acerqué hasta su resi donde tenían fiesta para variar… Haber si hay suerte y me toca la lotería y me muevo allí. Después de unas horas decidí que era hora de regresar a casa. Una hora de pedaleo bajo la lluvia fue una experiencia más que relajante.
Creo que este fue el setlist de Oasis (probablemente con otro orden):
Oasis - 21st October 2005 – Valby Hallen
1 Fuckin' in the bushes
2 Turn up the sun
3 Bring it all down
4 Lyla
5 Cigs & alcohol
6 Live forever
7 Mucky Fingers
8 Champagne Supernova
9 Wonderwall
10 Rock'n'roll Star
11 A bell will ring
12 The Importance of Being Idle
13 Guess God Thinks I'm Abel
14 Don't look Back in Anger
15 Acquiesce
16 My Generation
Dormí unas cuantas horas para prepararme para EL EVENTO. Fui para allí hacia las 4 (empezaba a las 8). Después de un poco más de una hora en bici, llegué al famoso Valby Hallen. Había algunos haciendo cola, pero nada espectacular. Los daneses se preocupan más por beber cerveza que por estar en primera fila. Después de aparcar la bici me encontré con un sevillano que había venido desde Lund (Suecia) sin entrada para verles. La aventura le costó 1300 coronas… Pero supongo que le mereció la pena. Lo injusto de todo esto fue que el concierto había sido cancelado previamente, así que los propietarios de una entrada antigua tuvieron reservada la zona más cercana a la banda. No fue justo. Yo que había llegado pronto y me había hecho un nuevo amigo, tuve que irme a esperar a otra cola. Allí conocí a unos cuantos daneses muy simpáticos que me ofrecieron cerveza y me contaron sus vidas. Uno era marino y había estado por España, pero sólo por el sur así que no conocía Gijón, el otro era más curioso: trabajaba en la guardia real. Sí, esos que están en la plaza con el traje pintoresco y no se pueden mover. Me dijo que era un trabajo muy aburrido y que eran 24 horas seguidas. Espero que con descansos… Luego, cuando estábamos dentro les perdí de vista con tanta gente saltando. Aún así disfrute de mi ídolos como era de esperar, aunque me esperaba algo quizás un poco más grandioso. Se ve que a Oasis le importa tanto España como Dinamarca.
Después del concierto traté de encontrar a mis nuevos amigos, pero no hubo manera. Quedé con Paolo y me acerqué hasta su resi donde tenían fiesta para variar… Haber si hay suerte y me toca la lotería y me muevo allí. Después de unas horas decidí que era hora de regresar a casa. Una hora de pedaleo bajo la lluvia fue una experiencia más que relajante.
Creo que este fue el setlist de Oasis (probablemente con otro orden):
Oasis - 21st October 2005 – Valby Hallen
1 Fuckin' in the bushes
2 Turn up the sun
3 Bring it all down
4 Lyla
5 Cigs & alcohol
6 Live forever
7 Mucky Fingers
8 Champagne Supernova
9 Wonderwall
10 Rock'n'roll Star
11 A bell will ring
12 The Importance of Being Idle
13 Guess God Thinks I'm Abel
14 Don't look Back in Anger
15 Acquiesce
16 My Generation
Ya no queda nada para entrar
Descanso para terminar
Jueves, 20 de octubre de 2005
Después de tanta paliza turística decidimos tomarnos el último día con calma. Así que sólo nos dedicamos a pasear por alguna calle para hacer algunas compras y descansamos el rato que quedaba en cafés. Nos quedamos con ganas de más, pero también la capital alemana nos había dejado KO..
Después de tanta paliza turística decidimos tomarnos el último día con calma. Así que sólo nos dedicamos a pasear por alguna calle para hacer algunas compras y descansamos el rato que quedaba en cafés. Nos quedamos con ganas de más, pero también la capital alemana nos había dejado KO..
Con los japoneses por Berlín
Miércoles, 19 de octubre de 2005
Otro largo itinerario por muchos de los sitios que nos habíamos dejado en el tintero ayer. Pero lo mejor fue quedaron con el amigo japonés de Tatsu que estudiaba en Berlín. Al final resultó ser él (Takamasa) y otros dos: Masataka y Guashibuya (o algo así). Además venían acompañados de un alemán de casi 2 metros que hablaba japonés. Era un panorama muy extraño. Parecía Gargamel con los pitufos o Blancanieves y los enanitos. Nos llevó a un restaurante de comida alemana y fue un shock para nuestros estómagos. La comida alemana es lo más pesado que te puedas echar al estómago. Comerla significa pasar un mal rato las dos siguientes horas. Así fue que luego fuimos a un bar y los japoneses se nos dormían.
Otro largo itinerario por muchos de los sitios que nos habíamos dejado en el tintero ayer. Pero lo mejor fue quedaron con el amigo japonés de Tatsu que estudiaba en Berlín. Al final resultó ser él (Takamasa) y otros dos: Masataka y Guashibuya (o algo así). Además venían acompañados de un alemán de casi 2 metros que hablaba japonés. Era un panorama muy extraño. Parecía Gargamel con los pitufos o Blancanieves y los enanitos. Nos llevó a un restaurante de comida alemana y fue un shock para nuestros estómagos. La comida alemana es lo más pesado que te puedas echar al estómago. Comerla significa pasar un mal rato las dos siguientes horas. Así fue que luego fuimos a un bar y los japoneses se nos dormían.
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