Sábado, 25 de marzo de 2006
Este sábado tocó la fiesta especial de la cocina de Paolo. El tema era Bollywood así que durante la semana estuve ocupado buscando un atuendo adecuado.
Resulta que las pelis de Bollywood son bastante occidentales. Las chicas van más orientales con vestidos de colores muy vistosos, pero en el caso de los chicos van en plan vaqueros y camisa.
Así que encontré esta maravillosa camisa de pura seda en una tienda de segunda mano. Me encantan las tiendas de segunda mano en Copenhague. Además de ser baratas y tener cosas increíblemente absurdas, las dependientas suelen ser ancianitas que se toman las cosas con mucha calma. Tardé un buen rato en pagar y marchar porque primero dobló todo muy cuidadosamente (a pesar de que la camisa estaba completamente arrugada y sucia) y luego, pues lleva también su tiempo explicar que es pura seda. Me sentí un poco mal sabiendo que esta camisa la iba a usar para una fiesta y poco más con tanta molestia por parte de la ancianita.
Luego completé el disfraz con un turbante usando la tela que me sobró de hacer la cola de mono. Ya estaba el disfraz! Bueno no, porque a Philip se le ocurrió comprar pintura marrón, y al final no quedó más remedio que embadurnarse en marrón.
El resultado fue espectacular, pero no duró demasiado. Parece que esto de cambiarse el color de la piel tiene terribles consecuencias. Poco a poco la pintura fue migrando de mi piel a la camisa y pantalones. Al final de la noche la camisa era un campo de batalla de distintas tonalidades de marrón.
La fiesta estuvo muy bien y nos hicieron varios juegos en los que teníamos que probar nuestras aptitudes para ser actores, incluyendo una representación improvisada de caperucita roja en danés. Qué difíciles son estas fiestas!!
La noche terminó haciendo de barman con mi cocina. Se pasa muy bien invitando a conocidos y sirviendo copas a diestro y siniestro (
lunes, marzo 27, 2006
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